Bismi Allahi Ar-Rahmani Ar-Rahim
Los Modales del Profeta (saws)
No demores en ayudar al débil, al desamparado y a la mujer. Y anda con ellos sin altivez ni orgullo.
Ten misericordia de la gente y los animales, entonces Allah tendrá misericordia de ti.
Quiere para la gente lo que quieras para ti mismo.
Se pulcro en tu apariencia y tu vestimenta.
Se valiente y di la verdad aún en detrimento tuyo.
Se paciente cuando la gente te lastime y perdónales, y Allah te perdonará.
Deja la indecencia, la cual está conformada por todo lo horrible y malo en palabra y acto.
No hables con arrogancia ni con frialdad, y no uses un lenguaje indecente ni siquiera en broma.
Habla siempre pacíficamente y haz que tu habla sea dulce.
Duerme temprano y levántate temprano para adorar y trabajar diligentemente.
Lee el Corán con medida y entendimiento, y escúchalo si alguien más lo lee.
No llegues tarde a la oración en congregación en la mezquita.
La modestia es parte de la fe.
El que trata de ayudar a la viuda y al necesitado es como un guerrero por la Causa de Allah.
La búsqueda del conocimiento es un deber para cada musulmán, sea hombre o mujer.
Den regalos unos a otros ya que estos alejan la malicia.
Allah es gentil y le gusta la gentileza.
Los jóvenes deben decir "salam" (paz) a los viejos, el que está parado al que está sentado y el grupo pequeño al grupo grande.
Nadie ha comido mejor alimento que aquel ganado por su propio esfuerzo.
Ten cuidado con la envidia, porque devora las buenas acciones así como el fuego a la leña.
Aquel que realmente cree en Allah y el Último Día, debe hablar bien o mantenerse callado.
Cuando alguien haya hecho un bien y le dice al que lo hizo "Que Allah te recompense". Él le ha agradecido de la mejor manera.
Debes decir la verdad, porque conduce a la virtud y la virtud conduce al paraíso.
Aquel que no agradece a la gente, no agradece a Allah.
Remover del camino lo que causa daño es una caridad.
El mejor de entre ustedes es aquel que es el más amable con su esposa.
Las acciones más amadas por Allah son aquellas que se hacen con regularidad, aún si éstas son pequeñas.
Allah está complacido con aquel siervo que cuando come un bocado, le alaba por ello, o bebe un sorbo y le alaba por ello.
Rezar en congregación es veintisiete veces mejor que rezar sólo.
Fuerte no es aquel que derriba al otro, sino es aquel que se controla a si mismo en un ataque de ira.
El mundo es una prisión para el creyente y un paraíso para el incrédulo.
La caridad no disminuye la riqueza.